Los Más Importantes

 

 

Cuando Jesús habitó en medio nuestro tomó por sorpresa a todo el mundo. Porque aunque lo consideraban una persona religiosa en realidad pasó muy poco tiempo con personas religiosas. Aunque era un hombre justo pasó muy poco tiempo con personas justas. Cuando Jesús habitó entre nosotros, las personas que no se consideraban religiosas, justas o buenas les encantaba pasar su tiempo con Él. Aunque ellos sabían que nunca podrían ser como Él, jamás se sintieron incómodos en compañía de Él. La gente (los pecadores) que no tenían nada en común con Él llegaban en multitudes para verlo y escucharlo. Pero lo que es aún más sorprendente es que a Jesús le encantaba estar con ellos también.

 

Las personas religiosas no podían entender a Jesús. No podían entender porqué es que a Él le atraían las personas no religiosas. No podían entender porqué los pecadores se sentían atraídos por Él. Las personas religiosas de su tiempo no podían concebirlo y comentaban entre ellos: “Si Él viene de Dios, ¿por qué es que escoge pasar tanto tiempo con los pecadores y tan poco tiempo con nosotros?” Ellos no lo entendían al igual que muchas personas hoy en día no lo entienden. Y tú, ¿lo entiendes? Permíteme preguntarte:

 

• ¿Por qué crees que Jesús se sentía atraído por personas que no eran en nada como Él?
• ¿Por qué es que esas personas, que no eran en nada como Él se sentían tan atraídos por Jesús?
• ¿Por qué es que esas personas, que no tenían nada en común con Él, venían a
escucharlo por multitudes?
• ¿Por qué esto molestaba a las personas religiosas?
• ¿Por qué los religiosos no se sentían atraídos por Jesús?

 

Mateo 9: 10-13 NVI

 

Mientras Jesús estaba comiendo en casa de Mateo, muchos recaudadores de impuestos y pecadores llegaron y comieron con él y sus discípulos. Cuando los fariseos vieron esto, les preguntaron a sus discípulos: —¿Por qué come su maestro con recaudadores de impuestos y con pecadores? Al oír esto, Jesús les contestó: —No son los sanos los que necesitan médico sino los enfermos. Pero vayan y aprendan lo que significa: “Lo que pido de ustedes es misericordia y no sacrificios.” Porque no he venido a llamar a justos sino a pecadores.

 

Permíteme preguntarte algo más:

 

• ¿Te atraen los pecadores como a Jesús le atraían?
• ¿Los pecadores se sienten atraídos por ti de la misma manera en que se sentían atraídos por Jesús?
• Cuándo de pecadores se trata, ¿sientes lo mismo que Dios?

 

Es simple, para Dios los pecadores son lo más importante.

 

Padre Celestial te pido que por favor me hagas atractivo a las personas pecadoras de este mundo, que ellos te puedan ver a ti en mi, pero sobretodo que yo me sienta atraído por las personas pecadoras, que yo tenga misericordia por ellos así como Tú la tienes por mi.