Planificando para el futuro

 

Viernes 12 de octubre del 2018

 

Se podría pensar que las personas que viven en la costa este de los Estados Unidos planifican con anticipación para prepararse para el futuro de la temporada de huracanes, después de todo esa temporada es algo que ocurre todos los años entre los meses de junio y noviembre. Pero nunca falla, las veces que un huracán ha llegado a nuestras costas es impresionante ver cuántas personas no se prepararon. Lo mismo ocurre en nuestras vidas, tenemos la tendencia de vivir el momento y prestarle poca atención al futuro. Esto es especialmente cierto para muchas personas que nos llamamos seguidores de Jesús; Dios nos da avisos pero planificamos muy poco o nada para las tormentas que se aproximan.

 

Unos 1050 años después de que Dios creó al hombre y le confió el señorío sobre la tierra, Dios observó a la humanidad y vio que todas sus intenciones, planes y acciones eran continuamente hacia el mal. El hombre y la mujer, la creación máxima de Dios, le quebrantó tanto su corazón que decidió borrar a todos los seres vivos de la faz de la tierra. Pero el amor de Dios por la humanidad era tan grande que se le imposibilitó destruirlos a todos. Por lo que Dios decidió extenderle su gracia a un hombre llamado Noé, gracia que se extendería aun a los hijos de Noé.

 

Noé era un hombre justo y honrado entre su gente. Siempre anduvo fielmente con Dios. Tuvo tres hijos: Sem, Cam y Jafet. Pero Dios vio que la tierra estaba corrompida y llena de violencia. Al ver Dios tanta corrupción en la tierra, y tanta perversión en la gente, le dijo a Noé: «He decidido acabar con toda la gente, pues por causa de ella la tierra está llena de violencia. Así que voy a destruir a la gente junto con la tierra. Constrúyete un arca de madera resinosa, hazle compartimentos, y cúbrela con brea por dentro y por fuera. Génesis 6: 9-14 NVI

 

Por unos 140 años Noé se dedicó a construir un arca en el medio del desierto, algo que le pareció una locura a todos los que lo vieron. En primer lugar antes de esto nunca había llovido sobre la tierra, antes brotaba agua desde el interior de la tierra y en segundo lugar, Noé estaba lejos de un cuerpo de agua lo suficientemente grande como para contener el arca que estaba construyendo. Pero Noé planificaba y trabaja para el futuro de algo que nunca antes había sucedido, pero porque Dios le dijo que iba a suceder y porque Noé le creyó a Dios planificó y trabajó en la construcción del arca. La mayoría de ustedes ya sabe la historia; tal como Dios había dicho, un día comenzó a llover y Noé, su familia y todo tipo de animales en pareja entraron al arca y se salvaron de la destrucción.

 

Y tú, ¿Estas planificando para el futuro? ¿O solamente estás viviendo el momento? ¿Cuál es tu plan financiero? ¿Me puedes mostrar el arca financiera que estás edificando? ¿Cuál es tu plan de salud? Y no sólo estoy preguntando acerca de tu plan de seguro, lo que estoy preguntando es que si las personas a tu alrededor ven tu disciplina en cuidar y mantener tu salud para cuando ya no seas tan joven. ¿Cuál es tu plan para tu familia, tu matrimonio, tus hijos y tus padres? Y la pregunta más importante, ¿Cuál es tu plan para el día en que te tengas que presentar delante de tu Creador? ¿Estás edificando un arca que todos pueden ver?

 

El caminar en los zapatos de Noé es creer que Dios es quien dice que es y que hará todo lo que Él ha prometido que haría. El caminar en los zapatos de Noé es planificar para el futuro.

 

Padre Celestial ayúdame a planificar el futuro en cada área de mi vida, pero sobre todo para ese momento glorioso en el que voy a estar delante de tu presencia, enséñame cada día más a construir lo que es correcto delante de ti para que todos los que me rodean puedan verlo y así ser luz como Tú me has mandado.