Talentos y habilidades

A cada uno de nosotros se nos ha dado un talento y una habilidad, es un regalo de Dios; por ejemplo, hay algunas personas que nacen con habilidades matemáticas, otras tienen tendencia al arte, a la computación, etc. Y esos talentos y habilidades provienen de Dios porque el ser humano viene a este mundo capacitado de esa manera, desde que la persona es pequeña se pueden ver las áreas en que se destaca, porque es algo que Dios programó desde el nacimiento.

La tendencia de nosotros en cuanto a nuestros talentos y habilidades es que por alguna razón pensamos que, como nos pertenecen, son para el beneficio de nosotros y los demás casi siempre quedan excluidos.

Por ejemplo, uno de mis programas preferidos es American Idol, en donde personas que saben que tienen algún talento o habilidad musical quieren utilizarlo, pero no para el beneficio de los demás, sino para que les traiga a ellos riquezas y gloria.

Lo mismo sucede con nosotros todos los días, ya que los talentos y habilidades que Dios nos dio, sean del nivel que sean, los utilizamos también de la misma manera, viendo de qué forma les podemos sacar provecho para edificar nuestro reino, nuestra gloria. De hecho, pasamos la mayor parte de nuestras vidas tratando de ver cómo nos aprovechamos de ellos cuando en realidad es todo lo contrario.

Dios quiere utilizarnos para que de manera física y tangible mostremos su amor y su gracia a otras personas y la mejor manera de hacerlo es a través de nuestros talentos y habilidades.

Lamentablemente, muchos creyentes hoy, incluyendo algunos de nuestros líderes, se han adueñado de esos talentos para traerse gloria a ellos mismos en vez de dársela a Dios. Sin embargo, mira lo que Dios nos dice sobre esto.

1 Pedro 4:10-11 (NVI)

Cada uno ponga al servicio de los demás el don que haya recibido, administrando fielmente la gracia de Dios en sus diversas formas. El que habla, hágalo como quien expresa las palabras mismas de Dios; el que presta algún servicio, hágalo como quien tiene el poder de Dios. Así Dios será en todo alabado por medio de Jesucristo, a quien sea la gloria y el poder por los siglos de los siglos. Amén.

Si hay alguien que es un ejemplo de cómo se deben utilizar sus talentos y habilidades es Bobby papá, antes de conocer a Jesús él utilizaba su habilidad como músico y cantante para su gloria y aunque alcanzó mucho éxito nunca se sintió lleno, mientras más gloria recibía menos satisfacción sentía. Y es que esos talentos y habilidades nunca Dios nos los otorgó exclusivamente para beneficio propio sino más bien para el beneficio de los demás. Pero un día se encontró con Jesús decidió que de ahí en adelante utilizaría todos sus talentos y toda su vida para beneficiar a otro y por mas de cuarenta años eso es lo que a hecho. No todo el mundo va a tener el don de cantar y llegarle a miles de personas, pero todos tenemos un don y un talento y deberíamos de estar utilizándolos para beneficiar a otros.

Es simple, nuestros talentos y habilidades nos fueron otorgados para que los utilicemos en beneficio de los demás y de esta manera traerle la gloria a Dios.

Padre Celestial ayúdame a poner a tu servicio y al servicio de los demás los talentos y habilidades que me regalaste desde que nací, porque aunque yo también disfruto de ellos, son para bendecir a otros y traerte de esa manera la gloria a ti, que eres el único que se la merece.