Buscando Dirección

No podría mencionarles cuántas veces he escuchado las siguientes palabras: “Tengo que tomar una decisión, y aunque he orado y buscado en la Biblia no encuentro la respuesta”. El problema es que el tiempo no está de mi lado y tengo que decidir ahora. ¿Cómo puedo saber cuál es la voluntad de Dios para mi vida? “

Bueno, lo primero que quiero que sepas es que tu Padre Celestial quiere que descubramos cuál es Su voluntad para nuestras vidas. Hoy me gustaría hablarte de un principio que Dios nos ha dado para que podamos descubrir su voluntad, especialmente cuando necesitamos una respuesta de inmediato y estoy leyendo la Biblia pero no encuentro en ella la respuesta a mi pregunta. Les adelanto que el principio del cual les quiero contar es tan obvio y simple que la tendencia es ignorarlo. Pero este principio es tan poderoso que muchas personas sabias lo han utilizado con gran éxito, mientras que otros lo ignoraron y terminaron con grandes fracasos.

Cuando necesites tomar una decisión y no estés seguro de cuál es la voluntad de Dios, lo más factible es que uno o ambos de los siguientes factores estén presentes en tu vida. Primero, que la decisión que vas a tomar está tan llena de emociones que no te permite ver claramente. Y segundo, que la decisión que necesitas tomar va más allá de tus conocimientos y habilidades. Cuando esto sucede, necesitas aprender a buscar consejo, aunque pienses que tus emociones no son un obstáculo y creas que tienes el conocimiento suficiente para tomar la decisión por tu cuenta sin la ayuda de nadie. Si tienes que preguntarte, ¿Cuál será la voluntad de Dios? Tienes que aprender a pedir consejo.

Proverbios 15:22 NTV

Los planes fracasan por falta de consejo; muchos consejeros traen éxito.

Al pedir consejo, uno de los mayores errores que la gente comete es escoger a la(s) persona(s) equivocada(s). Por esto me gustaría darte algunos consejos sobre cómo escoger las mejores personas para que se conviertan en tus consejeros. Después, me gustaría sugerirte un par de preguntas que te pudieses hacer una vez que hayas escogido a las personas adecuadas para aconsejarte.

Primero, escoge a alguien que no tiene nada que perder con decirte la verdad. A veces los amigos y la familia no son la mejor opción, ya que tienden a estar emocionalmente envueltos y quizás también tienen algo que perder si te dicen toda la verdad.

Segundo, Escoge a alguien que ya ha llegado adonde tú quieres llegar. A veces cometemos el error de pedirle consejos a las personas con quienes vamos caminando, cuando más bien deberíamos pedirle consejos a los que ya están a donde nosotros queremos estar. Mejor busca a la persona que haya alcanzado o hecho lo que tú quieres hacer y pídele que te aconseje.

Tercero, Busca los consejos de varias personas.
Escoge a alguien que conozcas pero también deberías considerar personas que no conozcas, pero que sí tienen el conocimiento y la experiencia para aconsejarte. En el capítulo 11 del libro de proverbios versículo 14 Salomón dijo: “Sin dirección, la nación fracasa; el éxito depende de los muchos consejeros.” Así que no te limites al consejo de una sola persona porque el éxito se encuentra entre los muchos consejeros.

Escoger las personas correctas para darte consejos es muy importante, pero las preguntas que les hagas son igual de importantes. Así que ahora me gustaría sugerirte un par de preguntas para cuando estés buscando el consejo de otros.

La Primera pregunta es: ¿Están mis opciones alineadas con los principios y las leyes de Dios? Si escogiste buenos consejeros lo más probable es que ellos sepan más sobre la voluntad providencial y moral de Dios que tú. Lo que sí sabemos es que Dios nunca te pedirá que rompas sus principios y leyes para cumplir Su voluntad en tu vida. Así que debes asegurarte de que tus opciones siempre estén dentro de los principios y las leyes de Dios.

Segunda pregunta, ¿Cuál es la decisión sabia? Hay veces que se te presentarán muchas opciones, pero no sólo quieres escoger una buena decisión dentro de las opciones que tienes, sino que quieres tomar la decisión sabia. Una buena decisión es aquella que se opone a la mala decisión. Una decisión sabia es la mejor decisión para tu vida dentro de todas las buenas opciones.

Es SIMPLE, cuando necesites descubrir la voluntad de Dios para tu vida y no la puedas encontrar por ti mismo, es hora de pedir consejos.

Padre Celestial gracias porque pones personas alrededor mío que pueden aconsejarme para tomar decisiones sabias. Ayúdame a escuchar siempre los consejos que están alineados a tus leyes y principios porque de esta manera voy a saber cuál es tu voluntad en mi vida.