A veces hay que decir “No” – Bobby Cruz Jr

 

Jueves, 14 de enero

 

El comienzo del año es la temporada en la cual nos enfocamos en mejorar nuestras vidas. Es la temporada en la que nos enfocamos en adelgazar, ahorrar y mejorar. El problema es que el mejorar a menudo es contra intuitivo porque la clave para convertirse en una mejor persona es aprender a enfocarnos menos en nosotros mismos para enfocarnos más en mejorar las vidas de las personas que nos rodean. Sin embargo, esto requiere que rindamos una parte de nuestras vidas, requiere un poco de nuestro tiempo y dinero. También requiere el uso de nuestros talentos y habilidades no sólo para nuestro propio bien, sino también por el bien de los demás. Va a requerir que aprendamos a decirnos “no” a nosotros mismos para decirle “Sí” a algo mas grande y mejor.

 

Marcos 8: 34-36 NVI

Entonces llamó a la multitud y a sus discípulos.—Si alguien quiere ser mi discípulo —les dijo—, que se niegue a sí mismo, lleve su cruz y me siga. Porque el que quiera salvar su vida, la perderá; pero el que pierda su vida por mi causa y por el evangelio, la salvará. ¿De qué sirve ganar el mundo entero si se pierde la vida?

 

Cuando Jesús vivió en esta tierra era común verlo rodeado por multitudes que lo seguían a todas partes. Algunos lo hacían por curiosidad, pero otros porque se sentían amenazados por su popularidad y buscaban la oportunidad para matarlo. Sin embargo, la mayoría de las multitudes lo seguían porque querían que Jesús les ayudase a mejorar sus vidas. Pero Jesús se dirige a ellos y en esencia lo que les dice es que si realmente quieren mejorar sus vidas el ser parte de la multitud no es suficiente. Van a tener que aprender a negarse a sí mismos para llegar a ser mejores personas. Van a tener que decirse “no” a ustedes mismos para poder decirme “sí” a mí y convertirse en mejores personas y por consiguiente mis discípulos.

 

El negarse a ti mismo significa decirte “no” a ti mismo para que puedas decir “sí” a algo más grande y mejor. No es suficiente ser parte de la multitud que buscaban mejorar sus vidas, no es suficiente asistir a la iglesia y cantarle alabanzas a Jesús. Si realmente quieres mejorar tu vida tendrás que aprender a decirte “no” a ti mismo para poder decirle “sí” a Jesús. El mejorar nuestras vidas, al igual que seguir a Jesús, se trata de negarnos a nosotros mismos para poder considerar las necesidades y deseos de los demás. No es que Jesús quiere quitarnos algo, por el contrario, nos está ofreciendo la oportunidad de salvarnos de nosotros mismos.

 

Amado Jesús, gracias por la oportunidad que me das de negarme a mí mismo y considerar las necesidades y deseos de otros como más importantes que las mías, porque gracias a esta gran enseñanza que me dejaste puedo realmente ser una mejor persona y a través de tu gran amor y sacrificio puedo salvar mi vida.