Confia

 

 

Cada tradición de fe tiene una historia. Las tres mayores tradiciones de la historia en cuanto a la fe comparten el mismo punto de partida. Sí, el judaísmo, el islam y el cristianismo están de acuerdo en que Dios creó al hombre a su imagen y luego esa humanidad se rebeló y desordenó todas las cosas. Las tres tradiciones de fe usan al mismo hombre como punto de partida: Abraham. Dios escogió a un hombre para “limpiar” básicamente el desastre que la humanidad había creado. Este hombre, aunque imperfecto y profundamente defectuoso, escogió confiar en Dios a pesar de la imposibilidad de su situación. Escogió creerle a Dios. Abraham creyó y esta fe lo llevó a estar en una relación correcta con Dios. Para muchos de nosotros, es difícil creer que para estar bien con Dios lo único que hay que hacer es creerle a Dios, pero es así de simple. Dios no está interesado en nuestros errores ni en nuestros pecados; Dios sólo quiere que confiemos en Él. Esta es una gran semana para entregarle a Dios esas áreas de nuestras vidas en donde no hemos confiado en Él.

Lunes
Personal

Ora para que Dios te dé la valentía para creer y confiar en Él en aquellas áreas que aún no le has rendido completamente.

 

Martes
Finanzas

Seguimos orando para que podamos entregarle nuestras finanzas a Dios y confiar en Él para que provea nuestras necesidades.

 

Miércoles
Familia

Oremos por nuestros miembros de la familia que no conocen a Jesús y que luchan por creer en Jesucristo como su Señor y Salvador.

 

Jueves
Iglesia

Hoy oramos específicamente por los ministerios de niños y jóvenes. Como la mayoría de ellos están fuera de la escuela en esta época del año, oren para que Dios los proteja este verano.

 

Viernes
Líderes

 

Sigamos orando por los líderes de nuestra Iglesia. Enfoquémonos especialmente en aquellos que están haciendo de facilitadores de grupos para la nueva serie Punto de Partida.

 

Sábado
Compañeros de trabajo/de clase

Persevera en orar por tus compañeros de trabajo y de clase, pidiéndole a Dios para que sirvas como luz en sus vidas; guiándolos de las tinieblas a Cristo.

 

Domingo
Almas perdidas

Finalmente, oremos por las almas perdidas que nos encontramos cada día. Pidámosle a Dios que nos haga valientes, para que podamos hablarles sin temor.