El dinero resuelve muchos problemas

Comer agrada a la gente, el vino le alegra la vida y el dinero le resuelve muchos problemas.
– Eclesiastés 10:19 NTV

Seamos honestos, ¿cuántos de tus problemas se resolverían de inmediato si tan sólo tuvieses más dinero? La verdad es que para la mayoría de nosotros la vida sería más sencilla si tuviésemos más dinero. Piensa en cuan simple sería tu vida si no tuvieses que preocuparte de pagar una hipoteca, el alquiler, tarjetas de crédito o préstamos.

Hace algunos años le pregunté a un amigo mío que es muy rico cuál era según él el secreto de la riqueza. Su respuesta me sorprendió: “es simple, no se trata de cuánto tienes sino más bien de cuánto das”. Luego pasó a mostrarme ejemplos reales de las personas más ricas del mundo. Me enseñó cómo en un año determinado regalaban hasta un billón de dólares y el siguiente año su valor financiero aumentaba. Lo curioso es que he conocido a este hombre desde hace muchos años y lo he visto hacer grandes cantidades de dinero, luego perderlo todo y después hacerse rico de nuevo. Cuando miro hacia atrás me doy cuenta que había algo que nunca dejaba de hacer y es que siempre era dadivoso, cuando tenía y aún cuando no tenía.

Deuteronomio 15:10 NBD
No seas mezquino sino generoso, y así el Señor tu Dios bendecirá todos tus trabajos y todo lo que emprendas.

Lucas 6:38 NTV
Den, y recibirán. Lo que den a otros les será devuelto por completo: apretado, sacudido para que haya lugar para más, desbordante y derramado sobre el regazo. La cantidad que den determinará la cantidad que recibirán a cambio»

Malaquías 3:10
Traigan todos los diezmos al depósito del templo, para que haya suficiente comida en mi casa. Si lo hacen —dice el Señor de los Ejércitos Celestiales—, les abriré las ventanas de los cielos. ¡Derramaré una bendición tan grande que no tendrán suficiente espacio para guardarla! ¡Inténtenlo! ¡Pónganme a prueba!

El secreto de ser rico no es cuánto puedes obtener sino más bien cuánto puedes dar. Así de simple.

Padre Celestial ayúdame a ser generoso, no solamente porque tú prometes que me devolverás todo lo que yo dé con un corazón generoso, sino lo más importante, porque es un mandamiento tuyo y quiero ser obediente a ti.