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Miércoles, 06 de abril

 

 Tu autoridad moral determina tu nivel de influencia

Me parece fascinante que Jesús sea la persona más influyente de todos los tiempos y sin embargo nunca ocupó una posición religiosa o política. Es la persona más influyente de todos los tiempos y sin embargo, su ministerio sólo duró tres años y se limitó a aproximadamente una circunferencia de veinticinco millas. ¿Cómo es que un hombre que caminó la tierra hace más de dos mil años atrás sigue influenciando a miles de millones de personas en todo el mundo?

 

Filipenses 2: 5-8 NVI

La actitud de ustedes debe ser como la de Cristo Jesús, quien, siendo por naturaleza Dios, no consideró el ser igual a Dios como algo a qué aferrarse. Por el contrario, se rebajó voluntariamente, tomando la naturaleza de siervo y haciéndose semejante a los seres humanos. Y al manifestarse como hombre, se humilló a sí mismo y se hizo obediente hasta la muerte, ¡y muerte de cruz!

Cuando Jesús vino a nuestro mundo su nivel de influencia no fue determinado por su posición como el Hijo de Dios. Él no se presentó diciendo: “¡Yo soy el Hijo del Dios Omnipotente y ahora todo el mundo va a hacer lo que yo digo!

 

“Más bien se hizo nada, asumió nuestra naturaleza humana, se convirtió en nuestro servidor y luego murió en la cruz en nuestro lugar. Cuando Jesús vino a este mundo tuvo que escoger relacionarse con nosotros a través de la autoridad posicional o la autoridad moral, pero Jesús para tener una máxima influencia escogió la autoridad moral. La autoridad que proviene de la integridad y no de una posición.

 

Los niveles de influencia de Jesús fueron alcanzados por su autoridad moral; por sus sacrificios y no por sus títulos o estatus. Su posición como el Hijo de Dios le pudo haber dado el poder y la fuerza para obligarnos. Pero fueron sus sacrificios los que le dieron la credibilidad para influenciarnos.

 

Las personas que más nos influencian en nuestras vidas tienen autoridad moral.

Tu posición, título o estatus puede que te den autoridad sobre las personas. Pero tu credibilidad es la que te va dar influencia sobre ellas. Autoridad posicional te da poder, pero la autoridad moral, la cual es el resultado de tu credibilidad, te da algo mucho más grande y es el poder de influenciar.

 

Padre Celestial tu amado Hijo no sólo vino a este mundo para morir en el lugar que me correspondía a mí, sino que vino como el ejemplo máximo de autoridad moral, gracias a su carácter perfectamente íntegro hasta hoy en día sigue influenciando mi vida, te pido que me ayudes a imitarlo cada día más para poder a través de mi integridad influenciar a otros y atraerlos a una relación creciente con ese Jesús perfecto y maravilloso.