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Martes, 14 de junio

 

En pocas palabras, no somos buenos interpretes de las circunstancias, porque algunas cosas que pensábamos que eran buenas terminaron siendo malas, mientras que otras que pensábamos eran malas terminaron siendo buenas. ¿No es cierto que algunos de los capítulos más difíciles de nuestras vidas terminaron siendo una bendición? Quizás fue cuando injustamente te despidieron de tu trabajo, pero aunque fue un momento difícil Dios lo utilizó para darte un mejor trabajo o quizás tu propio negocio. Quizás fue una relación que se rompió pero fue lo que te permitió conocer y casarte con la persona que hoy en día es tu pareja. Posiblemente estabas atravesando un problema de salud pero esa circunstancia fue la que te llevó a conocer a Dios más de cerca.

 

Lo que muchos cristianos no entienden es que Dios utiliza las diversas pruebas de nuestras vidas para hacer crecer y madurar nuestra fe. Sí, a veces nuestras pruebas son el resultado de nuestras propias malas decisiones, mientras que otros veces Dios permite que nos sucedan. Pero no importa cual sea la razón de nuestra prueba, Dios quiere utilizarla para hacer crecer nuestra fe y acercarnos más a él. En el primer siglo Santiago les escribe a un grupo de hombres y mujeres que estaban atravesando muchas pruebas por haber puesto su fe en Jesús. Y cuando analizaban sus vidas se preguntaban por qué las cosas les iban tan mal. Pero Santiago les escribe precisamente para decirles que lo que ellos pensaban que era algo malo realmente era Dios trabajando en sus vidas para hacer algo bueno.

 

Santiago 1: 2-3 NVI

Hermanos míos, considérense muy dichosos cuando tengan que enfrentarse con diversas pruebas, pues ya saben que la prueba de su fe produce constancia.

 

Santiago les escribe para que en vez de ver sus pruebas de una manera negativas las considerasen una oportunidad para Dios obrar. Santiago les dice, “considérense muy dichosos”; esta palabra que utiliza Santiago “considérense” es un término griego que se utiliza en matemáticas o contabilidad. Lo que les está diciendo es que a medida que están sumando y restando las pruebas que están atravesando el resultado final es que deberían sentirse muy dichosos. Lo que les está diciendo es que miren sus pruebas desde la perspectiva de Dios, por que desde la perspectiva de Dios estas pruebas son un vehículo para hacer crecer nuestra fe.

 

La fe no es algo que sólo aplicamos cuando las cosas marchan bien, también es necesario madurar nuestra fe para aplicarla aun cuando las cosas aparentemente marchan mal.

 

Padre Celestial ayúdame a considerarme dichoso en medio de las pruebas viéndolas desde la perspectiva tuya, ya que son una gran oportunidad para crecer en mi fe y mi relación contigo. Enséñame a atravesar las pruebas sabiendo que estás trabajando en mí y que a la vez las utilizas para luego darme algo aún mejor.