Que Brillen Mis Acciones – Bobby Cruz Jr

http://i799.photobucket.com/albums/yy280/ICAdoral/Born%20for%20this%20DEVOTIONAL%20banner_zpsngjdzfbm.jpg

 

Viernes, 22 de abril

Dios te creó a propósito y con un propósito divino en mente. Por esta razón, toda tu vida es extremadamente importante para Dios, no sólo espiritualmente hablando, sino también en lo secular. La mayoría de nosotros entendemos la importancia de nuestro crecimiento espiritual, pero pocos de nosotros entendemos lo importante que son para Dios nuestras metas seculares. Y es porque nuestras metas seculares tienen más potencial divino de lo que nos pudiésemos imaginar, pero no por las razones que pensamos.

 

Cuando Nehemías y el pueblo de Jerusalén decidieron reconstruir, para ellos esto era mayormente un esfuerzo secular. Ellos estaban pensando en la paz y la prosperidad que una ciudad fortificada les brindaría. Pero Dios estaba interesado en algo de mayor importancia para Él; Dios estaba interesado en recibir la gloria y llevarles la salvación a las naciones vecinas.

 

“Israel, tú eres mi siervo y me traerás gloria”. – Isaías 49: 3.

“Yo te haré luz para los gentiles, y llevarás mi salvación a los confines de la tierra”. – Isaías 49:6.

 

Cuando Dios escogió a la nación de Israel no lo hizo porque ellos eran mejores que los demás habitantes de la tierra. Los eligió como un punto de luz para reflejar su gloria y extender la salvación al resto del mundo. Por esta razón, mientras que Nehemías y los trabajadores se enfocaban en la reconstrucción de los muros, Dios estaba enfocado en recibir la gloria y así extender la salvación. Y eso es precisamente lo que Dios logró, porque aún los enemigos de Jerusalén tuvieron que reconocer que lo que se había logrado fue gracias a la intervención divina de Dios.

 

La muralla se terminó el día veinticinco del mes de elul. Su reconstrucción había durado cincuenta y dos días. Cuando todos nuestros enemigos se enteraron de esto, las naciones vecinas se sintieron humilladas, pues reconocieron que ese trabajo se había hecho con la ayuda de nuestro Dios.             – Nehemías 6: 15,16 NVI

 

Después de finalizar los muros Nehemías regresó a Persia como se lo había prometido al rey. Algunos años más tarde decidió visitar Jerusalén y cuando llegó encontró que el pueblo de Jerusalén estaba exhibiendo la misma mala conducta que originalmente les había causado caer en desgracia. Su comportamiento secular se convirtió en el mismo que exhibían las naciones seculares alrededor de ellos. En otras palabras, ya no estaban cumpliendo con su propósito de ser la luz del mundo. Luego de esto Dios no habló más por unos cuatrocientos años. Hasta que Jesús, el Mesías entró en la ciudad de Jerusalén y dijo:

 

Ustedes son la luz del mundo, como una ciudad en lo alto de una colina que no puede esconderse. Nadie enciende una lámpara y luego la pone debajo de una canasta. En cambio, la coloca en un lugar alto donde ilumina a todos los que están en la casa. De la misma manera, dejen que sus buenas acciones brillen a la vista de todos, para que todos alaben a su Padre celestial.”

Mateo 5: 14-15 NTV

 

La responsabilidad de ser la luz del mundo ya no es algo exclusivo de los israelitas. Ahora Dios nos mira a ti y a mí y desea que vivamos nuestras vidas de tal manera que otros puedan ver nuestras buenas acciones y cause que ellos alaben a nuestro Padre Celestial. Por esto es que nuestras vidas seculares son tan importantes para Dios.

 

Padre, que mis buenas acciones brillen a la vista de todos, para que todos puedan alabarte a ti mi Padre Celestial.