QUIERO, QUIERO, QUIERO

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Jueves, 22 de octubre

Lo Que Quiero

Vivimos en una cultura completamente inclinada a lo que “yo quiero”. Tú dices: yo quiero ser feliz, quiero casarme, quiero divorciarme, quiero ser famoso, quiero ser rico. No importa lo que quieras, siempre va a haber alguien dispuesto a satisfacer tus deseos. En nuestra cultura la mentalidad del “yo quiero” es tan frecuente que si lo que quieres es ilegal entonces alguien va a argumentar para que lo legalicen, si lo que quieres es inmoral entonces vamos a redefinir lo que es inmoral y llamémoslo moral. Esta mentalidad de “yo quiero” es tan poderosa que un grupo de hombres en los Estados Unidos están presionando a los políticos para legalizar relaciones íntimas entre hombres y niños varones menores de edad. Esta forma de pensar incluso ha penetrado en la iglesia cristiana y ahora tenemos predicadores que nos enseñan que podemos hacer lo que queremos en vez de decirnos lo que debemos de hacer.

Lo Que Debo

Hay una gran diferencia entre lo que debo hacer y lo que quiero hacer. Te lo explico de esta manera: sé que por mi condición debería de comer menos dulces, pero quiero comer alimentos azucarados, sé que debo hacer ejercicios, pero cuando llego a casa sólo quiero descansar, sé que debo orar y leer la Biblia más a menudo pero quiero salir con mis amigos o yo sé que debería asistir a la iglesia los domingos, pero quiero quedarme en casa descansando. El problema con lo que “yo quiero” es que no siempre se alinea con lo que “yo debo”. Y cuando lo que quiero no está alineado con lo que debo la elección siempre debería ser “lo que debo“ y no “lo que quiero”.

Disciplina

La disciplina es la práctica de hacer lo que “debo hacer” en vez de lo que “quiero hacer”. En nuestra cultura estamos acostumbrados a hacer todo lo contrario; hacemos lo que queremos en vez de lo que debemos y no deberíamos sorprendernos cuando terminamos con resultados que no nos gustan. No necesitamos convencernos del valor de la disciplina. En cualquier área de tu vida que seas disciplinado siempre terminarás con avances y resultados positivos. Si eres disciplinado con tus ejercicio vas a terminar con buenos resultados. Si eres disciplinado con tu dinero que vas a terminar con resultados positivos financieros. Cuando decidimos hacer “lo que debemos” en vez de “lo que queremos” aunque lo hagas con una mala actitud siempre terminarás con resultados positivos.

Mateo 21: 28-31 TLA

Jesús también les dijo: —¿Qué opinan ustedes de esto que voy a contarles? Un hombre tenía dos hijos, y le dijo al mayor de ellos: “Hijo, ve a trabajar en la viña.” »Él le respondió: “¡No quiero ir!” »Pero después cambió de idea y fue a trabajar. »Luego el hombre también le dijo a su hijo menor que fuera a trabajar, y él le respondió: “¡Sí, señor, iré!” »Pero el muchacho en verdad no fue. ¿Cuál de los dos hijos hizo lo que el padre quería?

 Permíteme preguntarte, ¿cuál de los dos terminó más feliz? Cuando lo que quieres hacer está en conflicto con lo que debes hacer siempre escoge lo que debes, así terminarás feliz. ¿En qué áreas de tu vida estás haciendo lo que quieres hacer en lugar de lo que debes hacer?

Padre Celestial muéstrame esas áreas de mi vida en las que hago lo que quiero en vez de hacer lo que debo, gracias porque siempre me guías a hacer lo que es correcto, y aunque a veces lo haga con la actitud incorrecta, de igual forma salgo beneficiado y trae felicidad a mi vida.