Resistiendo a Dios
Viernes 31 de agosto de 2018
Como niños nuestra tendencia era la de resistir a nuestros padres; simplemente no pensábamos de la misma manera. Los niños no entendían por qué sus padres los forzaban a bañarse todos los días y las niñas no podían entender por qué no podían tener un novio. Y por causa de nuestra resistencia nuestros padres tenían que repetir las mismas cosas una y otra vez. Y nuestra respuesta siempre era: “¿Pero por qué?” Y frustrados nuestros padres respondían: “Porque lo digo yo!” Luego crecimos y nos convertimos en padres y ahora somos nosotros los que les decimos a nuestros niños que tienen que bañarse todos los días y a nuestras niñas que son demasiado jóvenes para enamorarse. Y al igual que nuestros padres, nos encontramos repitiendo las mismas cosas una y otra vez.
No se amolden al mundo actual, sino sean transformados mediante la renovación de su mente. Así podrán comprobar cuál es la voluntad de Dios, buena, agradable y perfecta. Romanos 12: 2 NVI
Como hijos de Dios, nosotros también tendemos a resistirnos y la razón es porque no pensamos de la misma manera que Él. Es posible que tu primera reacción sea pensar que no resistes a Dios. Pero la verdad es que todos lo hacemos. Algunos resisten a Dios en su matrimonio; sabes lo que Dios quiere que hagas como esposa o como esposo pero como no piensas igual a Dios escoges resistirle. Algunos resisten a Dios en la manera en que manejan sus finanzas, tiempo y prioridades. Y todos nos encontramos en un área u otra como niños pequeños pensando que lo que Dios quiere no tiene sentido. Pero como ahora somos adultos ya no decimos: “¿Pero por qué?” Lo que hacemos es resistir la voluntad de Dios y seguir haciendo las cosas como mejor nos parece.
El problema es que Dios creó todo el sistema y leyes y sólo Él sabe cómo funciona. Lo fascinante es que las leyes de Dios fueron creadas para nuestro beneficio y cuando ponemos en práctica sus leyes en el matrimonio, la familia, nuestro tiempo, nuestras finanzas y en todas las áreas los que nos beneficiamos somos nosotros. El problema es que como no pensamos igual a Dios nuestra tendencia es de resistir en vez de obedecer. Por eso es que Dios quiere que le permitamos transformar nuestras vidas a través de la renovación de nuestras mentes. Porque si lográsemos ver nuestros matrimonios, hijos, tiempo, dinero y nuestras vidas desde su punto de vista actuaríamos de manera diferente.
El Permitirle a Dios renovar nuestras mentes nos lleva a una vida transformada y una vida transformada destruye nuestra resistencia a Dios. Porque cuando vemos como Dios ve, actuaremos como Jesús actuó y cuando pensamos de la manera que Dios piensa entonces vivimos como Jesús vivió.
Padre Celestial ayúdame a no resistirte para que puedas renovar mi mente y así transformar mi vida. Quiero ver como Tú ves, pensar de la manera que Tú piensas, porque sé que tus leyes las creaste para mi beneficio, ayúdame a través de tu gran amor a permitirte transformar mi vida a través de la renovación de mi mente, para que yo pueda vivir en esta tierra de la manera que Jesús vivió.
Robert Cruz Jr.
Bobby Cruz Jr. became Senior Pastor of CDA Miami in 1999, continuing the work that his father, Bobby Cruz began in 1980. Bobby Jr. is an engaging speaker whose passion is to lead people in a growing relationship with Jesus. He has five children and he lives with his wife Ana in Doral, FL.