Transformación 4, Mejor dos
Jueves, 26 de julio de 2018
Dios los cría y ellos se juntan.
Las personas con las que interactúas diariamente tienen mucha más influencia en la dirección y calidad de tu vida de la que te puedes imaginar. Desde los alimentos que comes hasta la ropa que usas. Desde cómo te sientes hasta como hablas. Y desde lo que piensas hasta la manera como actúas. Cada área de tu vida ha sido y se verá afectada adversa o positivamente por las personas con las que interactúas.
Camina con sabios y te harás sabio; júntate con necios y te meterás en dificultades. Proverbios 13:20 NLT
Este es un principio asombroso; si quieres llegar a ser sabio todo lo que tienes que hacer es relacionarte con personas sabias. Pero si decides convivir con necios, no te convertirás en necio pero sí te vas a meter en muchas dificultades. Veamos la definición bíblica de una persona sabia. Una persona sabia es aquella que sabe lo que es correcto y lo que está mal y escoge hacer lo correcto. En cambio, el necio sabe la diferencia entre lo bueno y lo malo pero decide hacer lo malo. Una persona sabia dice, aunque el fumar es legal, escojo no hacerlo porque el fumar conduce al cáncer y a las enfermedades del corazón. En cambio el necio dice, sé que fumar puede matarme, pero de algo me voy a morir.
Las malas compañía corrompen el buen carácter. 1 Corintios 15:33 NVI
Muchos de tus defectos de carácter se atribuyen directamente a las personas con quienes escoges convivir. Si vas a escoger ser feliz tendrás que elegir convivir con las personas adecuadas. Porque el ser feliz no es algo que lograrás por tu cuenta.
A través de esta semana hemos estado diciendo que la felicidad es el resultado de vidas transformadas. Y dijimos que nuestro Padre Celestial quiere transformarnos a través de la renovación de nuestras mentes. Que si pensamos diferente actuaremos de manera diferente. ¿Cómo aprendemos a pensar de manera diferente? Una manera de hacerlo es:
- Enfocarte en las personas que te van a ayudar, no en las que te van a obstaculizar.
Hoy hemos llegado al séptimo y último ejercicio de enfoque. Y la decisión de hoy es la de elegir convivir con personas que te ayudarán a lograr tu meta de ser transformado de tus heridas, complejos y malos hábitos; y por consiguiente, el lograr ser consistente y verdaderamente feliz.
Es mejor ser dos que uno, porque ambos pueden ayudarse mutuamente a lograr el éxito. Si uno cae, el otro puede darle la mano y ayudarle; pero el que cae y está solo, ese sí que está en problemas. Del mismo modo, si dos personas se recuestan juntas, pueden brindarse calor mutuamente; pero ¿cómo hace uno solo para entrar en calor? Alguien que está solo puede ser atacado y vencido, pero si son dos, se ponen de espalda con espalda y vencen; mejor todavía si son tres, porque una cuerda triple no se corta fácilmente. Eclesiastés 4: 9-12 NLT
Tú no llegaste al lugar en donde te encuentras solo o sola y tú no desarrollaste tus complejos y malos hábitos que no te permiten ser plenamente feliz por tu cuenta. De la misma manera, no puedes recuperarte por tu cuenta. Necesitas comenzar a relacionarte con las personas adecuadas. Y para mí no hay un mejor lugar para desarrollar nuevas relaciones como en la la iglesia local. Pero no sólo cualquier iglesia local, una a la que asistan seguidores de Cristo que entienden cuánto nos necesitamos los unos a otros.
Padre Celestial gracias por mostrarme la importancia de escoger bien las personas con las que me relaciono, ayúdame a ser una persona sabia y no necia y también a andar con personas sabias, para no terminar mal parado. Gracias por la oportunidad que me das de ser transformado y de enseñarme las herramientas necesarias para alcanzar la verdadera felicidad de manera consistente.
Robert Cruz Jr.
Bobby Cruz Jr. became Senior Pastor of CDA Miami in 1999, continuing the work that his father, Bobby Cruz began in 1980. Bobby Jr. is an engaging speaker whose passion is to lead people in a growing relationship with Jesus. He has five children and he lives with his wife Ana in Doral, FL.