Lunes 23 de julio

 

 

Somos imperfectos, no siempre hacemos las cosas bien. Esto se debe a que muchas de nuestras decisiones las tomamos en base a las heridas, los complejos y los malos hábitos que cargamos en nuestras vidas. La buena noticia es que Dios nos perdona todos nuestros pecados, pero no se detiene allí. Él también quiere transformar nuestras vidas.

 

No imiten las conductas ni las costumbres de este mundo, más bien dejen que Dios los transforme en personas nuevas al cambiarles la manera de pensar. Romanos 12: 2 NVI

 

Lo que una persona piensa determina cómo actúa y cómo actúa determina los resultados en su vida. Por eso no debería sorprendernos de que hayan tantas personas que aunque sus intenciones sean buenas no logran ser felices. Y esto se debe a que no están alcanzando los resultados que desean porque sus decisiones han sido tomadas en base a pensamientos equivocados. Por esto Dios quiere ir más allá de perdonarnos, Él quiere transformarnos cambiando nuestra manera de pensar. Si pensamos diferente, actuaremos diferente y si actuamos diferente terminaremos con resultados diferentes. Si vas a escoger ser feliz vas a tener que ser transformado en tu manera de pensar.

 

Felices los que desean de todo corazón que se cumpla la voluntad de Dios, porque Dios atenderá su deseo. Mateo 5: 6 BLP

 

Hoy vamos a ver dos de siete maneras en que podemos obtener una transformación de nuestras vidas a través de la renovación de la mente. Y durante los próximos días veremos los cinco restantes.

 

1. Enfócate en cambiar un defecto a la vez.

Cuando quieres cambiar como luce tu cuerpo por fuera tienes que cambiar lo que le pones adentro; tienes que aprender a comer de manera diferente. Si quieres cambiar la forma en que tu vida luce, tienes que cambiar las cosas en las que te enfocas, si te enfocas en las cosas correctas pensarás de la manera correcta. De tu lista de inventario moral personal escoge sólo uno de tus defectos, no intentes trabajarlos todos a la vez. Si aun no has escrito un inventario moral personal quizás deberías hacer una pausa para hacerlo y luego continuar.

 

El sabio siempre busca la solución más práctica, pero el tonto anda por las nubes.– Proverbios 17:24 PDT

 

2. Enfócate en una victoria un día a la vez.

No se preocupen por el día de mañana, porque el mañana traerá sus propias preocupaciones. Cada día tiene ya sus propios problemas.” – Mateo 6:34 NVI

 

Cada día enfócate en un solo defecto. Enfócate en ese defecto con urgencia, que sea tu prioridad, pero sin prisa; no te preocupes por lo que pasará mañana, preocúpate sólo por el día de hoy. Con urgencia pero sin prisa.

 

Simplemente cambiando tu enfoque comenzarás a cambiar tu forma de pensar y una vez que hayas cambiado la forma en que piensas estará en camino a la transformación que te llevará a la verdadera felicidad.

 

Padre Celestial gracias por tu perdón y por querer transformar mi manera de pensar para que yo pueda alcanzar la felicidad. Te pido que por favor me ayudes a tomar la decisión de querer se transformado, enfocándome en cambiar un defecto a la vez y en enfocarme en obtener la victoria un día a la vez. Enséñame a vivir como dice tu palabra, sin preocuparme por el día de mañana, porque basta a cada día su propio mal.