Nadie Como Tú

Comenzamos nuestra vida siendo creados por Dios de una manera distinta al resto de las personas. ¿Sabías que no hay nadie como tú en todo el mundo? Nunca ha habido nadie como tú, presentemente no hay nadie como tú, y nunca habrá nadie como tú. Eres único. Tienes tus propias huellas digitales, una combinación única de rasgos faciales y tu propio ADN. Esa es la manera en que Dios te creó y esa es la manera en que Él quiere que seas. ¿Sabías que Dios no sólo te creó único físicamente? Él también te creó con un plan y propósito único en tu vida. Pero a medida que vamos envejeciendo algo que no estaba supuesto a suceder nos sucede y comenzamos a ser moldeados con los mismos patrones de este mundo, comenzamos a lucir como todas las demás personas; con los mismos patrones sociales, políticos y religiosos. Mira a tu alrededor y en línea general todo el mundo luce y actúa de la misma manera. No estoy tratando de decir que todos los patrones de este mundo son malos, en realidad hay algunos que son buenos. El problema es que Dios no te creó para que lucieras y actuaras como los demás. Dios te creó para lucir y actuar como su Hijo Jesús.

Verdaderamente Único

Si hay alguien único ese es Jesús; Jesús amaba y oraba por sus enemigos mientras que nosotros apenas oramos por nuestros seres queridos, así que muchísimo menos por nuestros enemigos. Aunque era Dios vino a este mundo como un siervo, bendecía a los que lo maldecían, nunca trató de preservar su vida y por el contrario, voluntariamente la rindió. Mientras todos corrían para ser el más grande, Jesús siendo el más grande voluntariamente se humilló. Jesús nunca se dejó moldear por los patrones de este mundo, aunque fue un ser humano al igual que nosotros, no lucía ni actuaba como nosotros. La gente se preocupa por el aquí y el ahora, Jesús se preocupaba por lo eterno. Mientras que la gente buscaba la comodidad Jesús se movió completamente fuera de su área de comodidad para salvarnos. La manera que Jesús lucía y actuaba era verdaderamente única, moldeado por su Padre Celestial. Su propósito y planes venían de arriba, no de este mundo. Jesús fue y es verdaderamente único. A medida que vamos envejeciendo se supone que deberíamos ser moldeados, pero no por los patrones de este mundo, sino moldeados desde arriba, por nuestro Padre Celestial. De la misma manera que Dios tenía un plan y un propósito único para su Hijo Jesús, Él también tiene un plan y un propósito único para ti y para mí, pero nunca lo vamos a encontrar en los patrones de este mundo. Porque fue Dios quien nos diseñó y es Él quien nos quiere moldear.

Romanos 12: 2 NVI

No se amolden al mundo actual, sino sean transformados mediante la renovación de su mente.

Amor, Obediencia y Servicio

Las personas que nos conocen, ¿Ven a Jesús en nuestras vidas? ¿Escuchan a Jesús en nuestras conversaciones? ¿Nos ven como únicos y diferentes en comparación con el resto de las personas del mundo? Al leer la historia de Jesús descubrimos que Él no era como ninguna otra persona, sin embargo a la gente le encantaba estar cerca de Él, especialmente las personas que no eran religiosas. Aunque Jesús no lucía ni actuaba como ellos, de todas maneras a la gente le encantaba estar con Él. Creo que la razón es que precisamente por el hecho de que Jesús no era como ellos les daba la esperanza de una vida mejor, Jesús les daba la esperanza de que había algo mas allá del mundo presente, Jesús les dio la esperanza de que Dios los había creado con un plan y un propósito.

Habían tres cosas que distinguían a Jesús del resto de las personas del mundo. Primero, la manera en que Él amaba a Dios y a los demás. Segundo, su compromiso de obedecer a Dios. Y tercero, la forma en que sirvió a Dios a través del servicio a los demás. Todos eventualmente vamos a ser moldeados, nadie viene a este mundo ya moldeado. Puedes escoger ser moldeado por los patrones de este mundo o puedes escoger ser moldeado por los planes y propósitos de tu Padre Celestial. Y tu Padre Celestial quiere moldearte con el carácter de su Hijo Jesús. Es cuando escogemos amar a Dios y a los demás, obedecer y servir a Dios de la manera en que Jesús lo hizo que comenzamos a ser moldeados por los planes y propósitos únicos de nuestro Padre Celestial.

Es simple, no fuiste creado para lucir y actuar como los demás en este mundo, fuiste creado para ser único, moldeado por los planes y propósitos de tu Padre Celestial.

Padre Celestial gracias por hacerme único, te pido que sigas cumpliendo en mí tu plan creado exclusivamente para mi vida; que cada día yo te permita moldear en mí el carácter de Jesús a través de mi amor incondicional hacia ti y hacia los demás y a través de mi obediencia y disposición de servirte siempre.