Lunes, 22 de junio

¿Cuándo fue la última vez que tuvo “uno de esos días”? Te despertaste tarde porque el despertador no funcionó. Ahora por estar de prisas te derramaste café encima. Sales corriendo por la puerta de la casa para descubrir que el sistema de alarma no esta funcionado. El auto no quiere arrancar, así que tienes que llamar a un mecánico. De camino al trabajo haces una oración, pero parece que la oración no va mas allá de tus pensamientos. Por fin llegas a tu trabajo y el jefe está molesto y comienza a insultarte por llegar tarde. Luego recibe una llamada telefónica y es la compañía de alarmas diciéndote que se te disparo el sistema de alarma de tu casa. Antes de colgar te entra otra llamada esta vez es el mecánico para informarte que va a costar

$800.00 para arreglar tu automóvil. Después de un día largo y difícil finalmente llegas a tu casa para encontrar que la ciudad dejo una multa de $175.00 pegada en la puerta de tu casa a consecuencias de una falsa alarma. Es uno de esos días, quieres llorar, gritar, maldecir, huir, no puedes esperar que el día termine.

2 Corintios 12: 7-9 NVI

7 … Así que, para impedir que me volviera orgulloso, se me dio una espina en mi carne, un mensajero de Satanás para atormentarme e impedir que me volviera orgulloso.

8En tres ocasiones distintas, le supliqué al Señor que me la quitara. 9Cada vez él me dijo: «Mi gracia es todo lo que necesitas; mi poder actúa mejor en la debilidad».

En el pasaje de la Biblia que leímos hoy encontramos que el apóstol Pablo no es que este teniendo un día malo, aparentemente ha estado atravesando de una mala temporada en su vida. Ahora bien, si alguna vez hubo alguien quien merecía que Dios contestar sus oraciones tenía que ser el apóstol Pablo. Pablo era un hombre de gran fe, muchos milagros se realizaron a través de él, aproximadamente una tercera parte del Nuevo Testamento fue escrito por él. Él era un hombre de compromiso dispuestos a hacer cualquier sacrificio que fuese necesario por el evangelio.

Pero tenía una condición desconocida que se había convertido en una fuente constante de vergüenza y de dolor. Tres veces oró a Dios para que se lo quitase, pero cada vez la respuesta era “no”.

El problema es que nuestras prioridades no son las mismas que las prioridades de Dios. La prioridad de Pablo era que Dios le concediera alivio de su situación la prioridad de Dios era la de producir humildad en Pablo. La prioridad de Paul era el estar cómodo la prioridad de Dios era el carácter y la integridad de Pablo. Para Dios el carácter de Pablo era tan importante que le permitió ser atormentado con el fin de mantenerlo humilde. Y lo mismo es verdad para ti y para mí que Dios está mucho más interesado en el desarrollo de nuestro carácter que en darnos comodidad. Porque el propósito de Dios es que a través del carácter de Jesús que Dios quiere desarrollar en nuestras vidas podamos reflejar su Gloria en nuestro alrededor.

Así que cuando estés pasando por un día malo una temporada difícil en tu vida y oras y no parece que Dios te está respondiendo, es porque que Dios está más interesado en el desarrollo de tu carácter que el darte comodidad. Sé que esto puede ser un poco duro de tragar pero si hay buenas noticias: En primer lugar, Dios te quiere dar su gracia, que siempre es más de lo que necesitas y segundo, cuando Dios termine contigo te van a gustar los resultados finales Sólo lean lo que dijo Pablo:

2 Corintios 12: 9-10 NVI

Así que ahora me alegra jactarme de mis debilidades, para que el poder de Cristo pueda actuar a través de mí. 10Es por esto que me deleito en mis debilidades, y en los insultos, en privaciones, persecuciones y dificultades que sufro por Cristo. Pues, cuando soy débil, entonces soy fuerte.

Es simple, Dios está más interesado desarrollar tu carácter que el darte comodidad sentir cómodo.

Verano de oración

Todo el mes de junio – Julio

Serie de verano

“PODER”