DIOS, FAMILIA Y LOS DEMÁS | Padres e Hijos
Las personas con las que nos relacionamos tienen un profundo impacto en la calidad y dirección de nuestras vidas. Todas nuestras relaciones pueden clasificarse en tres áreas: la primera, nuestra relación o falta de relación con nuestros padres; la segunda, nuestras relaciones fuera del hogar, y la tercera, nuestra relación o falta de relación con Dios. Que quienes somos hoy en día, lo que pensamos, cómo actuamos e incluso nuestras personalidades han sido moldeadas por las relaciones o la falta de relaciones en nuestras vidas.
La relación entre padres e hijos es quizás la relación más significativa en la vida de una persona. Recientemente leí un estudio en el que se les preguntó a los niños, ¿cómo pueden saber si una pareja está casada? Una de las principales respuestas fue: “si discuten, entonces probablemente estén casados”. Honestamente, la respuesta me pareció un poco graciosa, pero la verdad es que es inquietante, especialmente cuando la forma en que ven y se relacionan con sus padres tendrá un impacto profundo en sus vidas.
Para bien o para mal, la relación que tuvimos con nuestros padres ha tenido un efecto a largo plazo en nuestras vidas. Y nuestra relación con nuestros hijos tendrá un efecto a largo plazo en sus vidas.
Permíteme mostrarte cuatro maneras en las que la relación con nuestros padres puede haber impactado nuestras vidas:
- Si tuvimos padres atentos y expresivos, varios estudios demuestran que probablemente seremos más abiertos y sociables
- Si nuestros padres tendían a ser negligentes, los estudios demuestran que cuanto más negligentes fueron, más tenderemos a buscar y exigir atención como adultos
- Si nuestros padres tendían a ser reservados emocionalmente, los estudios demuestran que estaremos más inclinados a ser reservados emocionalmente
- Si nuestros padres se divorciaron o no se casaron, los estudios demuestran que tenderemos a ser despreciativos en cuanto al amor y las relaciones románticas
Obviamente, nuestros padres no son culpables de todos nuestros defectos, como tampoco son responsables de todas nuestras cualidades; pero sí influenciaron, y en muchos casos siguen influenciando, quienes somos hoy en día y en lo que nos convertiremos.
Instruye al niño en el camino correcto, y aun en su vejez no lo abandonará. – Proverbios 22: 6 NIV.
Padre Celestial te pido que me ayudes a instruir a mis hijos en el camino correcto para que aun cuando sean mayores no se aparten de él, sé que como padre tengo una gran responsabilidad de lo que les muestro a mis hijos con mi conducta, porque es viendo mi ejemplo que más aprenden. Gracias por tu gran amor y misericordia que me muestra como padre cuál es el camino que debo seguir para influenciarlos correctamente.
Robert Cruz Jr.
Bobby Cruz Jr. became Senior Pastor of CDA Miami in 1999, continuing the work that his father, Bobby Cruz began in 1980. Bobby Jr. is an engaging speaker whose passion is to lead people in a growing relationship with Jesus. He has five children and he lives with his wife Ana in Doral, FL.