En su libro, “Los siete hábitos de las personas altamente efectivas”. El autor Steven Covey nos ofrece una analogía de un hombre que trabajó muy duro para subir la escalera del éxito. Pero, cuando finalmente llegó al último escalón mientras miraba a su alrededor, descubrió que después de tanto tiempo y trabajo había apoyado su escalera en la pared equivocada. Esta es una ilustración perfecta de lo que le está sucediendo a tanta gente hoy. Parecen ser personas exitosas, pero cuando llegan al final de sus vidas descubren que habían apoyado su escalera en la pared equivocada. Te pregunto, ¿cómo sabes si tu escalera está apoyada en la pared correcta?

Vale más una buena reputación que un perfume costoso. Y el día que morimos es mejor que el día que nacemos. Vale más pasar el tiempo en funerales que en festejos. Al fin y al cabo, todos morimos, así que los que viven deberían tenerlo muy presente.  – Eclesiastés 7:1-2.

No es donde comienza tu vida lo que te hará exitoso, es donde termina. Algunas personas nacieron en circunstancias favorables, pero no terminaron con éxito. Mientras que otros nacieron en circunstancias desafortunadas, pero encontraron la manera de obtener el éxito. El Rey Salomón nos recuerda que el último paso de cada persona en la escalera que conduce a la vida exitosa es la muerte. Entonces, piénsalo, ¿qué te gustaría que las personas importantes en tu vida dijeran de ti cuando mueras? Tu definición personal del éxito está basada en lo que te gustaría que dijeran de ti. Supongo que lo que quieres que digan no tendrá nada que ver con las cosas que lograste o las personas con quien te asociaste. Apuesto a que mas bien tiene que ver con el tipo de persona que fuiste en sus vidas. Entonces para responder la pregunta, ¿cómo sabes si tu escalera esta apoyada en la pared correcta? Si la pared en la que estás recostando tu escalera prioriza el convertirte en la persona correcta por encima de quién conoces y lo que has logrado, entonces tu escalera está apoyada en la pared correcta y vas camino a una vida exitosa.

Padre Celestial qué importante son estos principios que me estás enseñando, si tengo mi escalera hacia el éxito apoyada en la pared correcta voy a llegar a ser esa persona correcta que Tú deseas que yo sea, inclusive al final de mis días; porque el verdadero éxito no es lo que estoy alcanzado sino en quien me estoy convirtiendo.