Ahora Sabemos | Relación no Religión

Nunca fui una persona religiosa, pero a una temprana edad mis padres me enseñaron a creer en Dios, más sin embargo no conocía a Dios. No siempre fui cristiano, pero un día decidí seguir a Jesús y la verdad es que sabía muy poco acerca de Él. Pero cuanto más escuchaba y leía acerca de Jesús, más comenzaba a entender y a conocer un poco más de Dios. La mayoría de las personas no se dan cuenta, pero la razón principal por la que sabemos cómo es Dios es porque Jesús vivió entre nosotros. Antes de eso solo sabíamos quién era Dios y qué había hecho, pero no teníamos idea de cómo Él es. No teníamos idea de qué es lo más importantes para Él.

“Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con todo tu ser y con toda tu mente”—le respondió Jesús. “Este es el primero y el más importante de los mandamientos. El segundo se parece a este: Ama a tu prójimo como a ti mismo.  De estos dos mandamientos dependen toda la ley y los profetas.”- Mateo 22: 37-40 NIV

Hasta este encuentro con Jesús, todo el mundo asumía que el enfoque de las leyes de Dios era comportarse bien y convertirse en una buena persona según lo medido por la ley. Pero lo que Jesús enseñó es que lo que es de máxima importancia para Dios no es la religión ni ser una buena persona, sino las relaciones, amar a Dios y amar a los demás.

Lo que aprendemos de Jesús es que Dios es un Dios relacional, no un Dios religioso. Que Él estableció sus leyes no para que podamos ser buenas personas, sino para guiarnos en el proceso de llegar a ser personas amorosas. Y no solo amarnos de la manera que nosotros nos amamos, sino amarnos de la manera en que Él nos ama.

Padre Celestial gracias por mostrarme que eres un Dios relacional y no religioso, que estás más interesado en que te ame a Ti sobre todas las cosas y a mi prójimo como a mí mismo, que en que yo me convierta en una buena persona. Ayúdame a vivir a diario dispuesto a cumplir estos dos maravillosos mandamientos, porque esto es lo más importante para Ti.