Responsablemente Preparado

Se dice que el éxito en cualquier ámbito de la vida es el resultado de dos factores principales; oportunidad y preparación. Al vivir en la costa sureste de los Estados Unidos, se nos recuerda constantemente estar preparados para posibles huracanes. A los de la costa oeste se les recuerda estar preparados para terremotos e incendios, mientras que a los que viven en el medio del país se les recuerda que se preparen para tornados. Nuestra cultura se prepara principalmente para evitar desastres, pero la vida de la mayoría de las personas termina en desastres porque no se prepararon para enfrentar las oportunidades. No me malinterpreten, siempre debemos prepararnos para los desastres, pero igualmente debemos prepararnos para las oportunidades que tienen el potencial de llevarnos al éxito.

Muchas veces la diferencia entre una persona exitosa y una no exitosa es la preparación. La pregunta es, ¿por qué algunos se preparan y otros no? En la parábola de Jesús de las diez vírgenes descubrimos la respuesta a mi pregunta. En la parábola, a 10 mujeres se les dio la misma oportunidad, cinco de ellas tuvieron éxito y las otras cinco no tuvieron éxito. Y, la razón de su éxito y falta de éxito no tuvo nada que ver con talentos, habilidades o incluso finanzas. La diferencia fue que cinco mujeres actuaron de manera responsable, mientras que las otras cinco actuaron de manera irresponsable.

Cinco de ellas eran insensatas y cinco prudentes. Las insensatas llevaron sus lámparas, pero no se abastecieron de aceite. En cambio, las prudentes llevaron vasijas de aceite junto con sus lámparas. Mateo 25: 2-3 NIV.

Si estás buscando crecer en una carrera, debes haberte preparado para ese crecimiento, de lo contrario, la oportunidad será para otra persona que sí se haya preparado. Si estás buscando invertir o abrir tu propio negocio, debes estar preparado financiera y profesionalmente para esa oportunidad. O, Si estás buscando casarte con la persona correcta, tienes que prepararte para ser el tipo de persona que la “persona correcta está buscando”. Porque es cuando las oportunidades se encuentran con la preparación que suceden grandes cosas.

Padre Amado ayúdame a prepararme responsablemente, a ser sensato y prudente en cada área de mi vida, porque es la manera en que voy a obtener el éxito. Gracias por enseñarme que es cuando las oportunidades se encuentran con la preparación adecuada que voy a alcanzar los resultados esperados y evitar los desastres.