¿Son Buenas Noticias?

Cuando escuchamos malas noticias, nuestra reacción inicial es esperar que no sea cierto. Si un compañero de trabajo te dijera: «Escuché que no nos van a pagar esta semana». Tu reacción inicial sería pensar o decir. «Espero que eso no sea cierto». Y luego averiguar si es cierto o no. Pero lo contrario también es cierto, cuando escuchamos buenas noticias nuestra reacción inicial es esperar que sean verdad. Si un compañero de trabajo te dijera: “Escuché que a todos nos van a dar un bono estas Navidades. Tu reacción inicial sería pensar o decir: «Espero que sea verdad». Y luego averiguar si es verdad.

Cuando Jesús vino al mundo, desde el principio se anunció como buenas noticias de gran alegría para todos. E incluso, aunque Jesús aún no había pronunciado una sola palabra, su mensaje fue anunciado como una buena noticia que traería gran alegría a todos. A los judíos y no judíos, a los ricos y a los pobres y a aquellos que eran buenas personas e incluso a aquellos que no eran buenas personas. Entonces, la pregunta es, ¿son buenas noticias para todos? Si es así, ¿por qué tanta gente rechaza el cristianismo?

Tal vez las personas rechazan el cristianismo porque han recibido una visión distorsionada o religiosa del cristianismo. No creen que el cristianismo sea bueno para el mundo. Tal vez tienen la perspectiva política del cristianismo que establece que el cristianismo es exclusivo para un determinado grupo de personas. Otros quizás piensan que su comportamiento los descalifica para ser receptores de las buenas noticias. Pero nuevamente, el cristianismo fue anunciado desde el principio como buenas noticias de gran alegría para todos.

En la noche en que nació Jesús, el ángel del Señor anunció:

 Hoy les ha nacido en la Ciudad de David un Salvador, que es Cristo el Señor.

Lucas 2:11 NVI

¿De verdad que son buenas noticias? ¿Si son buenas noticias para todo el mundo, entonces son buenas para ti? Supongo que solo si crees que necesitas un Salvador. Déjame darte la mala noticia primero, el estándar de Dios es perfección, ¿eres perfecto? Si no lo eres necesitas un Salvador. Y como nadie es perfecto, todos necesitamos un Salvador. Entonces, la buena noticia para todos es que Dios vino a este mundo, no para menospreciar o condenar al mundo, sino para salvarlo.

Por eso decimos, Feliz Navidad a todos, porque estas son buenas noticias de gran alegría para todos.

¡Gracias amado Jesús! Por venir a este mundo a salvarme, no a menospreciarme o condenarme, todo lo contrario, tu amor por mí no tiene límites, tanto que fuiste capaz de dejar el cielo para venir a esta tierra y salvarme. Yo celebro con gran alegría esa hermosa noticia de que nació mi Salvador, que es Cristo el Señor.