Hace unos años, recibí una alarmante llamada telefónica de mi hermana diciéndome: “Tienes que venir, a mi mamá la llevaron al hospital, está en la sala de emergencias». Le pregunté: ¿qué sucedió? «Perdió la memoria, no puede recordar nada», me respondió mi hermana. Cuando llegué, los médicos ya habían diagnosticado a mi madre con un trastorno conocido como amnesia global transitoria, el cual ocasiona una repentina pérdida de la memoria y en el que los eventos recientes simplemente desaparecen. Con AGT, puedes recordar quién eres y reconocer a las personas que son bien conocidas para ti. Lo que no puedes hacer es recordar dónde estás y cómo llegaste allí. Por eso, aproximadamente cada tres minutos mi madre preguntaba, ¿dónde estoy? ¿Como llegué aquí? La buena noticia es que la ATG generalmente desaparece en 24 horas. Pero durante esas horas, no sabes dónde estás, ni cómo llegaste ahí, ni a dónde quieres ir.

Un aspecto importante del crecimiento es poseer la auto-conciencia, es reconocer cuáles son tus fuerzas y debilidades y tus talentos y habilidades. Es saber de dónde vienes, dónde estás y hacia dónde vas. Para crecer intencionalmente se necesita trazar un rumbo. Pero esto es imposible hacerlo, si no sabes a dónde estás y más importante a dónde vas.

Cuando se trata de trazar un curso para el crecimiento intencional, generalmente hay tres tipos de personas:

1. Aquellos que no saben lo que les gustaría hacer. – Viven sus vidas sin rumbo fijo, son como un barco sin ancla y a la deriva en el mar. No pueden crecer porque no tienen nada a lo que aspirar.
2. Aquellos que saben lo que quieren hacer pero no lo hacen. – Este tipo de personas suelen molestarse fácilmente y a menudo critican a los demás. Se molestan por que reconocen que no están adonde deberían estar. Y son críticos con aquellos que están creciendo porque ellos mismos no lo están haciendo. No pueden crecer porque el saber a dónde quieres ir no es suficiente, tienes que configurar tus velas para así poder comenzar a moverte en la dirección correcta.
3. Los que saben lo que quieren hacer y lo hacen. – Estas personas se conocen y se comprometen a crecer. Viven vidas resueltas, llenas de pasión y motivación. Porque buscan el crecimiento necesario que los impulsa a llegar a su destino.

Padre Celestial ayúdame a ser el tipo de persona que sabe lo que quiere y lo hace, Tú siempre me llevas en la dirección correcta y eres tan bueno y compasivo conmigo que los planes que tienes para mí son de bienestar y no de calamidad, a fin de darme un futuro y una esperanza. Gracias por hacerme ver la importancia de trazar un rumbo en mi vida y trabajar intencionalmente para que Tú puedas cumplir tu propósito en mí.