El tiempo es uno de los mayores misterios de la vida; puedes medirlo, puedes sentir que se mueve hacia adelante, puedes describir el registro que deja atrás e incluso puedes predeterminar cómo lo consumirás. Pero lo que no puedes hacer es definirlo, guardarlo o detenerlo. La Palabra de Dios enseña que el tiempo y la vida van de la mano, por lo tanto, a medida que vives tu vida, debes tener en cuenta no solo lo que haces con tu vida sino también cuándo lo haces. Quizás por eso Salomón escribió;
No postergues el asunto, ¡hazlo enseguida! No descanses hasta haberlo realizado. - Proverbios 6: 4 NTV.
  El tiempo es uno de los regalos más preciados de la humanidad, con suficiente tiempo no hay casi nada que no puedas hacer o lograr. Pero el tiempo también es un ladrón. El tiempo te robará tu juventud, tu fuerza, tu salud y eventualmente todo lo demás que tienes. Cuando hablamos del tiempo, tendemos a decir cosas como, este no es un buen momento o este es un buen momento. Pero el tiempo en sí mismo no es bueno ni malo, lo importante es cómo eliges utilizarlo.
Así que tengan cuidado de su manera de vivir. No vivan como necios, sino como sabios, aprovechando al máximo cada momento oportuno, porque los días son malos. - Efesios 5:15:16 NKJ.
A medida que el mundo va pasando de una crisis a otra, es un recordatorio de que llegará un momento en que el reloj de Dios tocará la medianoche. En ese momento habrá un fin para el mundo tal como lo conocemos, pero también será un comienzo. El fin del mal y las injusticias del mundo y el comienzo del reinado de Dios en todo el mundo. Ahora, nadie más que Dios solo sabe cuándo ocurrirá esto, pero sí sabemos que con cada día y cada crisis que atravesamos estamos un paso más cerca. 1. Ten cuidado como vives: en pocas palabras, esto significa vivir tu vida cautelosamente y poco dispuesto o dispuesta a tomar riesgos innecesarios. 2. No vivas como necio, sino como sabio: una persona necia sabe lo que es correcto, pero decide no hacerlo. Una persona sabia sabe lo que es correcto y eso es lo que escoge hacer. 3. Aprovecha al máximo cada momento: cada día recibirás 24 horas, debes usarlas sabiamente, especialmente a la luz del hecho de que estamos viviendo en días malos. Amado Padre celestial te doy gracias por el tiempo que me das, gracias por esas 24 horas que recibo cada día y que Tú me permites vivir, te pido que me ayudes a invertir mi tiempo de manera sabia y no necia, ayúdame a aprovechar al máximo cada momento porque los días son malos.