El agradecimiento conduce a la Alegría

¿Cuáles son esas cosas en tu vida que en el algún momento eran motivo de agradecimiento, pero ahora te quejas de ellas? ¿Un trabajo, automóvil, propiedad, tu pareja, tal vez un miembro de la familia? 

Estén siempre alegres. Nunca dejen de orar. Sean agradecidos en toda circunstancia, pues esta es la voluntad de Dios para ustedes, los que pertenecen a Cristo Jesús. – 1 Tesalonicenses 5: 16-18 NIV

En la actualidad todo el mundo tiene algo de que quejarse. Los esposos se quejan de sus esposas y las esposas de sus esposos. Los padres se quejan de los hijos y los hijos de los padres. Solo mira las noticias y vas a ver a alguien quejándose de algo o de alguien. Es imposible, expresar gratitud cuando te quejas por la misma cosa o persona que dices que aprecias. El problema es que el quejarse no solo conduce a la ingratitud, sino también conduce al estrés, ansiedad, temores, ira, argumentos y pleitos. Entonces, ¿por qué es que nos quejamos tanto?

Hace poco leí un estudio realizado por la Dra. Berné Brown, profesora de investigación en la Universidad de Houston. Después de entrevistar a más de once mil personas durante un período de 12 años, la Dra. Brown señaló que lo más importante del estudio fue el descubrir la relación que existe entre la gratitud y la alegría. Ella asumió que sus estudios concluirían en que la alegría lleva al agradecimiento. Pero para su gran sorpresa los resultados fueron totalmente opuestos, lo que descubrió fue que la gratitud conduce a la alegría. Ella dijo que después de miles de entrevistas no encontró a una sola persona que se describiera a sí misma como alegre que no practicase activamente el agradecimiento

La Dra. Brown más tarde diría que la conclusión de los estudios cambió radicalmente su vida y la de su familia. Ella y su familia comenzaron a practicar de manera intencional el agradecimiento. No solo como un sentimiento o emoción sino con palabras y acciones. Ahora, todas las noches, la doctora Brown y su familia se sientan a la mesa y antes de comer, agradecen a Dios y luego cada uno de ellos toman un momento para expresar verbalmente aquello por lo que están agradecidos en ese día. La Dra. concluyó diciendo que el agradecimiento ha traído alegría a su hogar.